Hermandad de Guaditoca

NOMBRE DE LA HERMANDAD: Real e Ilustre Hermandad de Nuestra Señora de Guaditoca, Excelsa Patrona y Alcaldesa Perpetua de la Villa de Guadalcanal.

Datos relevantes

En una breve descripción, podemos decir que la devoción a Nuestra Señora de Guaditoca data del siglo XIII (“El Santuario de Ntra. Sra. de Guaditoca”, Pbro. Muñoz Torrado, año 1918). Pocos datos hay referentes a esto, salvo lo descrito por el autor de dicho libro, pero sí que consta la historia de la Aparición de la Santísima Virgen en las aguas del Arroyo de Guaditoca, sito en la Vega del Encinal, a un pastor cuyo nombre se desconoce. En actas de concejos que se refieren en el citado libro, se detallan datos relevantes a la piedad del pueblo de Guadalcanal y los pueblos vecinos a la Santísima Virgen, fechadas entre 1200 y 1300 D.C. Tradicionalmente, tanto la Virgen como el Niño Bellotero han gozado de una devoción amplia en Guadalcanal y los pueblos vecinos, de los que se contaban numerosas hermandades filiales, que acudían anualmente al Santuario en la fecha de la celebración de Pentecostés, donde tenía lugar una feria de ganado en los aledaños de la Ermita. El tercer día de la feria se celebraba la procesión de la Virgen alrededor del Santuario, bendiciendo los puestos y feriantes que acudían.

El Santuario primitivo se encontraba en las orillas del Arroyo, distando unos metros del que se conserva en la actualidad, que es obra del siglo XVII. En el año 1637 tiene lugar la primera
venida de Nuestra Señora de Guaditoca al pueblo de Guadalcanal, en una rogativa por lluvias; de esta venida se extrae el modelo y forma que se conserva en la actualidad anualmente cuando la Santísima Virgen viene a la Villa: la Imagen es trasladada a hombros por sus fieles hijos pernoctando en la Iglesia del Convento del Espíritu Santo, bajando a la Parroquia de Santa María de la Asunción al día siguiente en procesión, y celebrándose en la misma un novenario en su honor, finalizado el cual, la Santísima Virgen regresa a su Santuario. El Santuario cuenta con una bóveda artísticamente muy valiosa por los frescos que la conforman en su totalidad, obra de Juan de Brieva. En el año 1586 fue regido por su primer patrono, Alonso Carranco Ortega, y durante casi 3 siglos, los patronos regían los designios de la Hermandad, un modelo totalmente diferente a cómo lo conocemos en la actualidad.

 

En 1792, tras unas convulsas negociaciones entre los diferentes Ayuntamientos y Concejos, se decide trasladar la feria de ganado a la villa de Guadalcanal, lo que inicia la tradición de que la Virgen acuda al pueblo de manera anual para la celebración de dicha feria. Inicialmente se celebra en la Plaza de España, pasando al Real del Coso en el siglo XX. Se mantiene indeleble en el tiempo la tradición de la anual procesión de la Santísima Virgen el tercer día de la feria, siendo en la actualidad el mayor día festivo de nuestro pueblo.

 

De la fundación de la Hermandad no existen datos conocidos, pero sí de la reorganización de la misma en el año 1863. Una vez reorganizada la Corporación, tuvo especial papel la Reina Isabel II de España, dándole el título de Real (se desconoce la fecha en que se produjo). Conserva la Sagrada Imagen de la Virgen un aderezo de broche y pendientes propiedad de tan regia señora, que los luce anualmente en su estancia en Guadalcanal. La primitiva imagen, de autor desconocido, portaba en brazos al Niño Bellotero, siendo arrancado de la misma en actos vandálicos. La Sagrada Imagen fue destruida en los sucesos de la Guerra Civil de 1936, al hallarse la misma en Guadalcanal. Se conservó el retablo del Santuario, una magnifica pieza del siglo XVIII, de autor desconocido, que se conserva en la actualidad y ha sido recientemente restaurado por el restaurador Jorge Anillo. En dichos acontecimientos de 1936 no sufrió daño alguno el Santuario de nuestra Patrona. La actual imagen de Nuestra Señora es obra del escultor Antonio Illanes, de 1937, réplica de la anterior. Conserva un extenso ajuar de sayas y mantos de la primitiva imagen, que se han venido utilizando hasta nuestros días. Posee diversas coronas de orfebrería, siendo las más destacadas las dos piezas de plata de ley bañadas en oro, una que es obra de Seco Velasco de 1919, y la otra de Villarreal de 1996. Complementan sus atributos varios juegos de cetros y medias lunas en plata y oro. Destacar que la Santísima Virgen luce galas de Pastora en sus traslados en romería cada año, así como parte del tiempo que la Sagrada Imagen permanece en el Santuario.


De la historia reciente de la Hermandad podemos destacar las dos venidas extraordinarias de la Santísima Virgen al pueblo: en el año 2000 por el año jubilar decretado por el Vaticano en el segundo milenio del nacimiento de Cristo, y en el año 2012 al cumplirse los 375 años de su primera venida a la localidad. Destacar también la concesión de la primera medalla de oro de la Villa de Guadalcanal a la Santísima Virgen en el año 2001, y la concesión del título de Alcaldesa Perpetua de la Villa en 2017.